Por Waldo Lama, Líder riego y Sostenibilidad agroindustrial Empresas Iansa.
El año 2016 fue promulgada la Ley 20.920 que establece el marco para la gestión de residuos, la responsabilidad extendida del productor y fomento al reciclaje. El objetivo de esta Ley es disminuir la generación de residuos y fomentar la reutilización, reciclaje y otro tipo de valorización, a través de la instauración de la responsabilidad extendida del productor y otros instrumentos de gestión de residuos, con el fin de proteger la salud de las personas y el medio ambiente.
Si bien, el término de economía circular no está descrito en la Ley, se entiende que corresponde aquellas prácticas que tienen como objetivo evitar la generación de residuos y aumentar su valorización a través de procesos de reacondicionamiento o transformación a nuevos productos. La economía circular tiene como lineamiento principal llevar a las industrias hacia un manejo ambientalmente racional de sus residuos, donde prima el principio preventivo y la valorización de los residuos.
De acuerdo a la Ley 20.920 el pretratamiento que reciben los residuos para su valorización corresponde a las operaciones físicas preparatorias o previas a la valorización o eliminación, tales como separación, desembalaje, corte, trituración, compactación, mezclado, lavado y empaque, entre otros, destinadas a reducir su volumen, facilitar su manipulación o potenciar su valorización. De esta manera, se logra obtener nueva materia prima que permitirá generar nuevos productos que puedan volver a ser reintegrados en el comercio, lo que permite terminar con el circuito lineal, común en las industrias, e incorporar la economía circular en el mercado.
Empresas Iansa en la búsqueda constante de innovación dentro de sus procesos agrícolas y de una producción sostenible, se fijó como objetivo desarrollar un proyecto de economía circular con los residuos que año a año se generan en el riego para el cultivo de Tomate Industrial. La filial Agrícola Terrandes de Empresas Iansa, produce una superficie promedio de 500 ha anuales de tomate industrial en dos regiones del país (maule y Ñuble), las cuales se encuentran en su totalidad en producción bajo riego por goteo. Este método de riego ofrece grandes ventajas en torno a lo que respecta al uso eficiente del agua en el manejo del riego, permitiendo obtener una eficiencia de aplicación sobre el 90%, lo cual se traduce en mayores producciones agrícolas con menos agua utilizada por unidad de superficie comparado con el riego tradicional. Sin embargo, el riego por goteo para la superficie cultivada de tomate Industrial dentro de agrícola Terrandes, genera un residuo anual por concepto de cambio de laterales de riego (líneas de goteo) del orden de 3.400.000 metros. Lo anterior, es una consecuencia directa de la cosecha de tomate, ya que al cosechar se deben retirar los laterales de riego para no entorpecer el funcionamiento de las maquinas, lo cual genera en los laterales mucho daño mecánico que posteriormente genera filtraciones al tartar de ser reutilizados en una próxima temporada.
Por otra parte, la empresa chilena Exma ha desarrollado una tecnología de esferas flotantes para la cobertura de cuerpos de agua para mitigar la evaporación y proliferación de algas. Su nombre es Barrier Ball y están presentes en el mercado hace más de 10 años con esta tecnología que, además de ser muy eficiente (reduce un 80% la evaporación), aplica economía circular al utilizar plástico reciclado y energías renovables no convencionales para su fabricación. En el mismo contexto de sostenibilidad y bajo el concepto de economía circular aplicada, la empresa chilena Rembre apoya a corporaciones e industrias a materializar su promesa de sustentabilidad, por medio del manejo integral de residuos y valorización de más de 100 materiales distintos. Es así entonces, como Empresas Iansa realizó un trabajo conjunto con Exma y Rembre para desarrollar un proyecto de economía circular para fabricar esferas Barrier Ball utilizando las tuberías de riego en desuso como materia prima. Este innovador proyecto que protege el agua al recubrir por completo los tranques de riego disminuyendo considerablemente su evaporación, se tradujo en la reutilización de 5.300 kilos de plástico y aportará un ahorro de 1.055.000 litros de agua por año, además de una reducción significativa del consumo de alguicidas y mano de obra asociada a la limpieza del tranque y de los filtros asociados al bombeo y líneas de riego.
Empresas Iansa ha presentado su declaración frente al Calentamiento Global y el Cambio Climático, lo cual dentro de sus compromisos medioambientales para el 2025 está la revalorización de residuos y pasar de un 78% en el 2021 a más de un 86% el 2025, lo cual sin duda el proyecto de economía circular Barrier Ball contribuye de manera directa y significativa al logro de los objetivos propuestos por la compañía.