Por María José Torres, Coordinadora Residente del Sistema de las Naciones Unidas en Chile (ONU Chile).
A seis años de 2030, queda menos de la mitad del camino para cumplir los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) definidos por los Estados miembro de la ONU como esenciales para un futuro equitativo y sostenible. Pero materializar el progreso requiere un abordaje global y colaborativo para poder dar cuenta de las desigualdades y la sensación de descontento y desconfianza. Los conflictos y el cambio climático nos recuerdan a diario que estamos en un punto crítico.
Es imperativo que actuemos ahora. Gobiernos, mundo privado, academia, sociedad civil y medios de comunicación: todos debemos ser parte activa en este proceso.
La Cumbre del Futuro llevada a cabo hace pocos días, en el marco de la Asamblea General de la ONU en Nueva York, marcó el inicio de una nueva etapa en que el progreso acelerado de la Agenda de Desarrollo es un imperativo. Durante la Cumbre, los líderes mundiales se comprometieron a fortalecer la cooperación global, mejorar la gobernanza y reafirmar los compromisos con la paz y el desarrollo sostenible.
Chile, a pesar de los avances en diversas áreas, sigue enfrentando problemas estructurales que requieren acción urgente. Entre estos se encuentra la persistencia de desigualdades, especialmente entre los grupos más vulnerables de regiones rezagadas. Por otro lado, la gestión sostenible de los recursos naturales y la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero siguen planteando grandes desafíos y no podemos darnos el lujo de esperar más para actuar. Sumado a esto, es necesario avanzar en la creación de empleos decentes, asegurando que mujeres y jóvenes tengan oportunidades y de esta forma reducir la informalidad laboral.
El Marco de Cooperación para el Desarrollo Sostenible 2023-2026 firmado entre el gobierno y ONU Chile establece una hoja de ruta clara para abordar estos desafíos, pero acelerar el cumplimiento de la Agenda 2030 requiere de acciones concretas apoyados en los acuerdos de la Cumbre del Futuro.
Es fundamental que el liderazgo político de Chile mantenga un compromiso con la implementación de la Agenda 2030, articulando políticas coherentes y con visión de largo plazo. Asimismo, es necesario involucrar todos los sectores en la aceleración de los ODS porque solo así podemos generar soluciones efectivas y sostenibles.
Las empresas son actores económicos clave para esto. La evidencia muestra que integrar sostenibilidad en su núcleo de negocios, promover la innovación y la inversión responsable, así como empleos de calidad, no sólo refleja buenas prácticas de respeto a los derechos humanos, sino que también asegura impactos sociales y climáticos positivos y es, además, un buen negocio. En ese sentido, Pacto Global ha sido una plataforma muy valiosa para alinear los esfuerzos empresariales con los principios de los ODS y esperamos sigan ampliando sus socios incluyendo las PYMES.
Como ONU Chile, estamos comprometidos con facilitar los espacios necesarios para que esta colaboración intersectorial e interinstitucional florezca. El futuro de Chile, de la región y del planeta depende de nuestra capacidad para actuar unidos, con propósito y urgencia.