Con tan solo el 2% del PIB mundial, y por un periodo de 40 años, se podría poner en marcha una economía verde baja en carbono y con un uso más eficaz a la hora utilizar los recursos. Así lo visualiza un informe realizado por el Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA).
Un informe del organismo calcula la inversión suficiente para partir una economía verde a nivel mundial. La investigación estima si cada año se destinarán 1,3 billones de dólares en proyectos innovadores sostenibles, la economía de nuestro planeta progresaría igual o mayor que el previsto con los modelos económicos de hoy, esto sin incrementar la extenuación de los recursos.
Asimismo, dentro de las recomendaciones importantes figuran la aplicación de impuestos para modificar las preferencias de los consumidores y estimular la innovación verde y la inversión pública en desarrollo de capacidades y formación.
Otro punto importante es la eliminación de los subsidios que perpetuán la utilización insostenible de recursos como petróleo, gas natural, carbono, la pesca, y el agua, que hoy se estima que llegan al 1 ó 2 por ciento del PIB Mundial y que muchas de éstas ayudan a generar severos daños ambientales e ineficiencias en la economía mundial. De ser eliminadas, o reducidas se daría paso a la economía verde.